📖 You are reading the free text version. Get our mobile app for 🎧 audio narration, 💬 speaking practice, 🔄 instant translations, and 💾 vocabulary saving to enhance your learning experience.
Nunca pensé que preparar una fiesta pudiera ser tan complicado hasta que me tocó organizar el cumpleaños de mi sobrino.
Me llamo Diego y vivo en un pequeño pueblo de la costa. Este año quería hacer algo especial para el décimo cumpleaños de Lucas, mi sobrino, que es un niño muy alegre y energético.
Al principio, todo parecía ir bien: reservé un espacio abierto cerca de la playa, contraté a un payaso y pedí una gran torta. Sin embargo, el día de la fiesta, comenzó a llover intensamente. Los invitados llegaron con paraguas y ropa mojada, y la mayoría buscó refugio bajo un toldo improvisado.
Lucas estaba un poco decepcionado porque esperaba jugar en la arena y correr libremente. Intenté animarlo con juegos dentro de la carpa, pero el clima no ayudaba mucho. Cuando parecía que todo sería un desastre, uno de los niños sacó una guitarra y comenzó a cantar. Poco a poco, todos se unieron, y aquella reunión improvisada se volvió cálida y especial.
La lluvia continuó, pero dentro de ese pequeño grupo, la tristeza desapareció. Nos dimos cuenta de que, a veces, las celebraciones no dependen del lugar ni del clima, sino de las ganas de compartir momentos juntos.
Lucas terminó sonriendo y agradeciéndome, no por la torta o el payaso, sino por la música y las risas que compartimos bajo la lluvia.
Aquella fiesta inesperada se convirtió en uno de los mejores recuerdos de todos, y yo aprendí que los planes perfectos pueden cambiar y aún ser maravillosos.
This story contains important vocabulary that you could be learning! Our mobile app provides audio, speaking practice, instant translations, vocabulary saving, and progress tracking.